martes, 28 de abril de 2020

39 AÑOS RESISTIENDO


39  años  RESISTIENDO, Síndrome del Aceite  Tóxico de  colza.


El  próximo  viernes  1 de  mayo se  cumplen  39 años de la  muerte de la  primera  víctima del Síndrome del Aceite  Toxico, SAT, el niño de  ocho  años  Jaime Vaquero.

Treinta y  nueve  años después  hemos de  lamentar que   nuestro Aniversario coincida  con esta  terrible  crisis sanitaria mundial del COVID 19,  en  la que  muchas  vidas  humanas  están  siendo arrebatadas  terrible  e  inesperadamente  dejando con ello el dolor, la desesperanza y  la  impotencia que  supone  sufrir un suceso de estas terribles  consecuencias, anteriormente ya  sufrido por  nosotros.
Lamentamos profundamente que 39 años después parezca que se  ha  aprendido  poco de  nuestra terrible  experiencia:

·         Muertes inesperadas
·         Impotencia para quienes enferman por su curación.
·         Incomunicación y soledad en la enfermedad y la muerte.
·         Incertidumbre sobre el ahora y el futuro.
·         Caos hospitalarios.
·         Trabajo incansable de profesionales.
·         Científicos que no se ponen de acuerdo.




Queremos  hacer partícipe a la sociedad de  nuestra  situación,  una  crisis sanitaria  española  iniciada en  1981  en condiciones  similares a  este  COVID 19 con la   diferencia  que    nosotros  fuimos envenenados.

39 años después seguimos  padeciendo graves  secuelas, enfermedades  graves  y raras, hipertensión pulmonar, fibromialgias, esclerodermias, fatiga  precoz  y  crónica, estrés  postraumático cronificado, alteraciones  en la  piel  y  un largo etc. , acompañado de  la  necesidad de  seguir defendiendo  nuestra atención médica  especializada, investigación y recursos  sociales acordes a  las  situaciones de  nuestras  victimas como enfermos  crónicos.


Nuestra crisis no ha terminado y no terminará hasta que se  cumplan  los compromisos  asumidos  por  el Parlamento Español  y las necesidades que tenemos las  víctimas,  prioritariamente atención medica, investigación y conocimiento de la afectación en  nuestra descendencia.

Que  ese  día  sea de  recuerdo  y  homenaje de dignidad para  nuestras  victimas, nuestras  familias, los  profesionales  que  nos  cuidaron  , como lo están haciendo  ahora, sin  ningún “aplauso”   para  recordar, aun seguimos  sin  día de  luto por  nuestras 5.000 víctimas, aun seguimos  enfermas  casi 20.000 en todo el Estado. 



Que  quienes  están  sufriendo la perdida de seres  queridos, el dolor de la  enfermedad  y  el agotamiento por  un trabajo  vocacional  nunca sean  olvidados, que  siempre sean  cuidados  y que  ninguna  víctima sea   abandonada  jamás, porque  ese es  el mayor  delito.



Cuidado y cumplimiento de  compromisos  con todas las  víctimas,  siempre.

No hay comentarios: